Los pastores Mario y Jennifer nacieron y crecieron en Tegucigalpa, Honduras. Se conocieron en 2005 y comenzaron a asistir a una iglesia local, donde ambos se enamoraron de Dios y comenzaron a servirle. En 2007, después de graduarse de la universidad y mientras administraban un exitoso negocio, Dios los llamó al ministerio. Respondieron a Su llamado y comenzaron a servir como pastores de jóvenes.

Durante su primer mes como pastores de jóvenes, se dieron cuenta de que lo que los jóvenes necesitaban no era simplemente otro pastor, sino un toque tangible del Espíritu Santo en sus vidas. Esta realización los llevó a una profunda búsqueda de Dios y desencadenó un poderoso mover de Dios en el grupo de jóvenes de su iglesia local, con muchos jóvenes entregando sus vidas al Señor.

Han estado felizmente casados durante 13 años y tienen dos hermosas hijas, Isabella y Nathalia. 

En el año 2014, ellos visitaron la ciudad de McDonough durante sus vacaciones para ver a unos antiguos amigos que no habían visto en 5 años. Nadie sabía lo que iba a pasar, ya que Dios había estado hablando en sus vidas por un tiempo acerca de comenzar una iglesia, pero no habían recibido confirmación sobre el lugar. Al llegar a esta ciudad, Dios confirmó de manera contundente a través de Su Palabra que este era el lugar al que los estaba llamando, infundiendo en ellos un amor sobrenatural por esta ciudad y su gente. En 2016, dieron un paso de fe, sabiendo que Dios tenía un trabajo para ellos que hacer, y trasladaron a su familia desde Honduras

Mario y Jennifer se sienten privilegiados de servir a Dios, están apasionados con ver esta ciudad transformada por la mano de Dios.